Muse vuelve a Chile este próximo 13 de Octubre a la Pista Atlética del Estadio Nacional. El «Simulation Theory World Tour» se acerca al país, y con él, recordamos las veces que los británicos han estado en el país. Los oriundos de Devon, que debutaron con su álbum Showbiz, en 1999, pusieron pie firme en pequeños festivales hasta llegar a verlos en los gigantes: Leeds & Reading, Eurockéennes y el más grande de todos, Glastonbury. Poco sorprendente para aquellos que empezaron en esos años a seguirles, pues se sabía que era algo que podía pasar. El éxito fue tal, que ya en 2000 y 2001 su presencia fue algo más continua en toda Europa, llegando a grabar su primer DVD, Hullabaloo, en 2002 con los ya hits que tuvo el aclamado -y para muchos el mejor disco- Origin of Symmetry.
Años pasaron, éxitos llegaron y no pararon. Absolution y Black Holes & Revelations confirmaron lo que ya era un hecho: giras mundiales, hits y alcance para todos. Headliners en los festivales más grandes del mundo y, con esto, llamar la atención de lugares nunca antes recorridos por ellos: Oceanía, Asia y Latinoamérica. Año 2008, 26 de julio. Sold out y un Teatro Caupolicán hasta las masas. Era el debut de Muse en Chile, con New Born y ese piano magistral, ese que suena bien gracias a esos pocos que saben hacerlo como corresponde. Fue una hora y veinticinco minutos de locura y descontrol. Los mismos que, incluso Chris Wolstenholme, en palabras a La Tercera, y Matt Bellamy a una radio estadounidense, definieron como los 90 minutos más locos en el escenario que pudieron evidenciar. A 11 años de la locura de San Diego #850.
Luego de esta épica historia, contada por algunos como el mejor de los shows en vivo que Chile ha podido ver, llegamos a diciembre de 2010. U2 y su gira 360° confirmaban su venida a Chile. Con más de dos años en gira por todo el mundo, era turno de Sudamérica, y cómo no iba a ser épico, si los irlandeses venían con Muse, la banda que ya con The Resistance, liberado en 2009, demostraba que era la mejor banda en vivo del momento. Nuevamente haciendo de headliners en Glastonbury, los británicos acompañaron a U2 después de que en 2010 los viejos intérpretes de mega hits como One y Sunday Bloody Sunday tuvieran que cancelar su presencia en el mega festival, debido a problemas a la espalda que Bono sufrió.
Para volver a las andanzas, este grupo de ídolos mundiales caían a Chile, para dar inicio a la gira que involucraría una vuelta también por Argentina y Brasil. Es el 25 de marzo de 2011. 20 horas y Muse era parte de «La Garra», ese mega escenario que doblaba en altura al Estadio Nacional. 45 minutos donde repasaron sus éxitos como Plug in Baby y Stockholm Syndrome, sumado a las obras que solo han podido ser oídas en una sola oportunidad en nuestro país: Resistance y United States of Eurasia. Acompañaron lo ya visto en 2008 los temas de Starlight y Time is Running Out, cerrando con la épica Knights of Cydonia. ¿Lo bueno de esto? Evidentemente, Muse. Firme y fuerte como siempre. ¿Lo malo? Al no ser un show propio de la banda, el público que tanto fervor provocó en propios y ajenos, ya no lo fue, y es entendible, miles esperaban a U2. Pero ya qué.
Tras saltarse dos veces el regreso a Chile en 2013 y 2014, por motivos que escapan el alcance del equipo de redacción de Cajita Musical, llegaba lo que terminó siendo una bomba. Después del fabuloso anuncio de la fecha de salida de la séptima entrega de Muse, «Drones», llegaban las emociones, Psycho, Dead Inside y singles sueltos que demostraban que el éxito obtenido con The 2nd Law sería aún mayor con el regreso de fuertes guitarras y riffs que tanto enamoraron a aquellos que comenzaron a seguir a la banda al inicio de la década de los 2000. Después de haber realizado un anuncio oficial para Colombia, Brasil y Argentina, el 5 de junio de 2015 fue confirmado el regreso a Chile, una vez más, de Muse. Sin Drones, y sin la gira completa. No importaba, era el regreso oficial, con público «de local» cual equipo de fútbol con su propia hinchada. El 15 de octubre llegó rápido, eran solo meses de espera para algunos tras haber hecho una vigilia de 7 años entre shows, desde el mítico Caupolicán hasta lo que sería ahora el Movistar Arena.
Resultó lo que se esperaba: Con 90 minutos de locura, con éxitos a por millones, y estrenos de nuevas canciones como lo visto en Mercy y The Handler, eran el condimento perfecto para una noche que, para aquellos que asistieron, sería tan inolvidable como la primera vez en el Teatro Caupolicán. Más de 13 mil personas repletaron, corearon y cantaron al ritmo de éxitos tras éxitos, y cómo no, si empezar con una seguidilla de canciones que componían Psycho, Reapers y Plug in Baby, por supuesto que traerían un impresionante ambiente. Desde la espera fuera del recinto hasta el epílogo mismo.
Lo vivido en estos tres shows demuestran que la mezcla perfecta entre banda y fanático son siempre notorias en Sudamérica, con un gran complemento entre ellos, terminan dando un resultado hermoso. Todos felices, con shows formidables y una notoriedad evidente de la calidad de banda como lo es Muse. ¿Pedir más es ser egoísta? Para nada. Según reporteó Cajita Musical en sus inicios, en 2018, la banda británica tuvo la chance de acercarse el año pasado al país, pero la grabación del nuevo álbum, y con el cual están girando, Simulation Theory, trancó todo y dejó las cosas en vilo hasta 2019. Y cómo no, si Muse trae eso distinto y demuestra que el éxito se sostiene gracias a las nuevas ideas y ganas que se plasman día a día en el escenario.
Con una gira del disco que tuvo origen en noviembre de 2018, la cual ya estaba en curso, el anuncio era claro: Chile estará dentro del marco de la gira del Simulation Theory World Tour, resultando un producto aún más llamativo. ¿Por qué? Tal y como explicamos a lo largo de la nota, Muse se ha caracterizado siempre por ir más allá del mismo show: La puesta en escena es algo vital, y era algo que para este lado del planeta estaba siendo dejado de lado por diversas razones, ¿económicas? Seguramente. Para el próximo domingo 13 de octubre está fijado el regreso de Muse a Chile y Sudamérica, incluyendo esta vez también a Perú, Brasil y Argentina.
¿Qué hay de interesante? Absolutamente todo, bailarines de nivel mundial, un robot gigante que se da a conocer después de una historia que es construida a lo largo del show, papel picado y un sonido que envuelve todo lo que encuentra a su paso. El trabajo de la banda es espectacular. Recuerda que la venta de entradas continúa en Puntoticket.com/Muse. Todo es producido por DG Medios para Chile.
