La música, nuestra querida música; nuestros shows en vivo. El Estadio Santa Laura esperaba expectante una tarde noche de noviembre llena de esa música que nos llena, que nos encanta, y que, a pesar de situaciones evitables y mejorables, fue bien rendida. La música estuvo. Una tarde que también vivió situaciones irregulares en los ingresos al recinto, y una noche que sufrió una ausencia importante como la de Molchat Doma, además de cortes de luz y retraso en las presentaciones de LP y The Killers.
La jornada de jueves en el recinto de Independencia comenzaba con We Are The Grand y marcaba el retorno del Rockout Fest a las pistas tras 6 años de ausencia. Con tres álbumes de estudio y una carrera que, sin dudas, ha pululado por el oído de aquellos que gustan de la música nacional, dejando en claro que calidad hay, y de sobra. Nos acostumbramos a esos casi clásicos temas de festival como lo son Luna, Al Despertar y más. Y da gusto verlo, porque, sin querer queriendo, sabemos de su presencia al escucharlos.
Continuando la tarde, y así también la tenue llegada de público a eso de las 16 horas, comenzaba -de forma muy puntual- Las Ligas Menores, banda argentina que ha visto pasos por distintos festivales internacionales, tanto en Norteamérica como en nuestra querida Sudamérica, y que sigue sumando kilómetros y experiencia, a pesar de rondar siempre bajo el sello del rock independiente. Es la primera de tres presentaciones en nuestro país (le siguen Concepción y Quilpué) y, agradecidos constantemente del público que escuchó y presenció su show, de una forma dulce se despiden del escenario de Santa Laura. Simpatía y simpleza que llama la atención para aquellos que no son conocedores de su música, y esperamos sigan sumando adeptos, que vaya que lo merecen.
La tarde avanza y volvemos a la escena nacional con unos irreverentes. Cristóbal Briceño es un distinto, y su creatividad lo ha llevado a ser reconocido en todo el país, así también su carácter que, junto a su música, son una mezcla perfecta para ir encendiendo la parrilla. Briceño, Sánchez, Muñoz y del Real subieron puntuales al escenario y nos demostraron que ese regreso viene fuerte. Tras doce años de ese cambio a Ases Falsos, los Fother Muckers se presentaron en Rockout pisando fuerte y seguros de lo que hacen. Al momento de redactar esta nota recordamos felices en el equipo de Cajita Musical el poder volver a escuchar en vivo a un clásico de la primera década del 2000/inicios de la segunda. Diez canciones que pegan en la memoria y esa frase de «Estamos precalentando» de Briceño, irónico y cortante, también gusta, porque si estar precalentando es tocar con esa seguridad y experiencia, es porque defintivamente algo bueno hay. Jerarquía chilena, grandeza chilena que verá acción el próximo 3 de diciembre en el Teatro Caupolicán.
Ya entrada la tarde, y de un momento a otro, la pista del Estadio Santa Laura se empieza a llenar. Mientras muchos buscaban un refresco o unas frituras para llenar el estómago -con largas filas, pero expeditas-, los argentinos de Miranda! aparecían en el escenario felices y llenos de energía como siempre. Chile es su segunda casa, y lo han hecho notar constantemente en cada show y entrevista que dan. Santa Laura se les hace chico con la cantidad de éxitos que, sin duda, todos conocemos y recordamos con alegría. Es un Don que los argentinos tienen. Y es que, con más de 20 años de carrera, no podíamos esperar algo distinto. Cambio de ropa constante y un plus maravilloso con la química que demuestran. Poco podemos decir más que lo que todos conocen, y aquellos que no, también: Miranda pega y tiene un desplante envidiable tanto sobre como fuera del escenario. Perfecta jornada hasta el momento, nos sentimos Prisioneros de ellos.
Por cierto, Ale y Juli nos recibieron tras su show con una linda entrevista que pudimos realizar. Viene en los próximos días.
A un 70% de su capacidad, y con una puntualidad que realmente ha de destacar, LP se subió al escenario a romperlo todo. Con una intro que, para aquellos pocos que no conocen de su trabajo, cautivó a todos. Silencio total en momentos donde había que hacerlo, porque el desplante de Laura Pergolizzi es total. No por nada ha tenido el reconocimiento que la ha llevado a grandes festivales por el mundo, y que en nuestro país es un must. Desde antes de la pandemia, LP ya sabe de una gran fanaticada en Chile, y lo hace notar también con jerarquía. Churches, su último trabajo, vio luz en Santa Laura con dos de sus canciones: When We Touch y Goodbye. Así, pasando a Girls Go Wild, el escenario queda en silencio: un corte de luz que se prolongó por más de 10 minutos, incomodando a aquellos que llegaron desde temprano a agolparse a las rejas frente al escenario. Incomodando también a aquellos que desde graderías, tanto Andes, como Pacífico y Galería, no podían ver desde las pantallas laterales los shows. Se apagaron y no volvieron hasta el inicio del último show. Sin embargo, LP es grande, y sabe que con esa misma grandeza se sacan adelante momentos complicados. Natural y fuerte de voz como siempre, cerró su presentación con Lost On You, su éxito que, sobre todo en pandemia, la hizo llegar a niveles insospechados, y yendo in crescendo se hace notar en todos lados. Es una gran jornada a pesar de esos detalles que incomodan a aquellos que pagaron una alta suma de dinero para hacerse presentes en el recinto capitalino.
The Killers es una banda enorme. The Killers es una banda que ha estado a la cabeza del cartel más grande del mundo como lo es Glastonbury, así también de distintas ediciones de Lollapalooza alrededor del orbe. Chile es un lugar conocido para ellos y, con Brandon Flowers eternamente a la cabeza, salieron al escenario a las 22:37 horas. «Ustedes son los que aman el rock and roll, ¿cierto?», afirmaba el vocalista que, a sus 41 años, tiene un desplante que enamora. Una actuación teatral que maravilla. My Own Soul’s Warning es la canción que da inicio a una presentación llena de éxitos, con una jerarquía deslumbrante. Spaceman, When You Were Young, All These Things That I’ve Done y más, todas, coreadas a más no poder con un público que casi colmó en su totalidad el espacio dispuesto en el Estadio Santa Laura, aunque con una configuración de medio estadio.
Ronnie Vannucci Jr. en las percusiones también se sabe de libro esto de ser un showman, y brillando por sí solo, maneja los tiempos en Santiago. Una cercanía de Flowers con el público que, encendido, aplaudía y coreaba constantemente lo que The Killers tenía para nosotros. «Puedo escribir los versos más tristes esta noche. Pero esta noche el poema es Chile junto a the chileans«, declaraba el líder de los oriundos de Las Vegas, Nevada.
Pasada la medianoche, Mr. Brightside se hacía escuchar por duplicado. En un 50/50, primero en una versión más technopop, y después con la versión que todos conocemos e hizo saltar a más no poder a fanáticos. «Es mi primera vez, rompí el chanchito para ver a The Killers y valió totalmente la pena», declaraba Claudia, fanática de la banda que encabezó el cartel de Rockout, un festival que volvió a ver luz, y que, a pesar de las dificultades, se hizo notar fuerte y con un lineup con jerarquía, esa que a todos nos gusta.