Por Genaro Rencoret
El espacio del mar ha sido un tópico literario propio de la literatura occidental desde sus orígenes, tal como indica Juan Tobías Nápoli (2008). Más aún, según indica el profesor Svend Erik Larsen (2012), el mar ha cautivado la imaginación humana y ha dejado sus huellas en todo el mundo en textos, símbolos y mitos durante milenios. En vista de esto, en la música también se ha tomado el espacio del mar como tópico en distintas épocas. Como ejemplos históricos surgen la obra orquestal La mer (1905) de Claude Debussy, la zamba Alfonsina y el mar (1969) compuesta por Áriel Ramírez y el EP titulado En Prenda el Mar (2020) de la artista chilena Salares.
De los antecedentes enumerados, es urgente detenerse en la publicación de Salares porque da cuenta que el tema del mar ha estado sumamente presente en la música chilena durante el último tiempo. Esta cuestión permite explicar el reciente lanzamiento de El Poder del Mar (2021), álbum de 11 canciones del proyecto Arranquemos del Invierno de Pablo Álvarez -con quien tuvo la oportunidad de conversar-.
Sobre lo primero que hablamos con Pablo fue del recibimiento que ha tenido su último trabajo, pensando en el contexto de crisis sanitaria en el que aún nos encontramos. “Pienso que ha sido bien recibido”, dijo el músico nacional y agregó: “Me han escrito mensajes con mucho cariño sobre la música en general y eso siempre es bueno”. Aquí es relevante tomar en cuenta que este disco se enmarca en un tiempo de transformaciones personales de Pablo, según él mismo me comentó.
Ahora, la relevancia que ha tenido el mar para Pablo se ha ido construyendo desde su infancia. “Desde muy chico tuve una conexión con el agua. De a poco esta conexión se fue hacia el mar. En general, me gusta mucho estar en la naturaleza. Cuando era niño hacía deporte en el mar y lo hacía cotidianamente, cuestión que he mantenido en mi vida hasta ahora”, comentó el compositor. Profundizando, Pablo afirmó: “Paso mucho tiempo pensando en la playa y naturalmente eso se iba a traspasar a la música para empaparla, sobre todo en este disco donde las canciones fueron escritas desde ese lugar -aunque no literalmente-”. El artista nacional cerró diciendo: “En general, la naturaleza tiene un protagonismo sumamente importante para mí como ser humano y va más allá de la música. La naturaleza me impulsa a estar más cerca y profundizar en ella misma. Esto se traspasa a mí música porque voy relatando historias desde mi vida personal y las pongo en el contexto de la naturaleza y sus paisajes”.
Tal como afirma el profesor Svend Erik Larsen (2012), es posible comprender al mar como una imagen que sirve para interpretar los límites culturales y cómo éstos pueden ser quebrados por la ética, la fuerza y la experiencia humana. De esta manera, .las imágenes del mar que trabaja Pablo se alzan, siguiendo a Larsen (2012), como el ejemplo radical del proceso generativo, transformador y fundamental que los seres humanos debemos enfrentar: El reflexionar en torno a nuestras propias limitaciones y buscar puntos donde podemos acércanos, trascender o negociar estos mismos límites. Esta idea se expresa con claridad en los siguientes versos de la canción El Poder del Mar (2021): “Todo el mar y su poder / me dejó el cuerpo así / cuando yo lo atravesé y no estabas ahí”. Pablo deja en evidencia esta imagen del mar como “un lugar para perderse, y [donde] el rescate nunca se ha asegurado sin esfuerzos extraordinarios” (Larsen, p. 187).
Entrar en la sonoridad de El Poder del Mar (2021) me resulta difícil. No me alcanza la nomenclatura para poder definirlo por completo, cuestión que le comenté a Pablo mientras charlábamos. “Creo que es un disco pop. Lo pondría en ese lugar totalmente”, mencionó el artista nacional y añadió: “Lo defino como pop porque hoy en día es un género con un universo muy grande. Tiene elementos del indie, de la electrónica, del ambient y es muy atmosférico”. El ensamblaje de timbres que se encuentran en el álbum de Pablo hace que, finalmente, se construya un sonido que destaca dentro de los proyectos publicados en el territorio nacional este 2021.
Así, en vista de lo dicho anteriormente, El Poder del Mar (2021) no se ensambló de un momento a otro. Pablo comentó lo siguiente sobre la forma en que se trabajó el disco: “El proyecto fue expandiéndose y diluyéndose producto de la pandemia. Esto le hizo bien al material porque tuvimos mucho tiempo para conversar, pensar, repensar, replantear cosas, ver referencias y ahondar en las ideas que envuelven el disco”. Asimismo, el artista añadió: “El trabajo fue de mucho conversar, de profundizar y analizar -tanto con el productor del disco como con el director de los vídeos- sobre qué es lo que nos pasaba con la música. Se profundizó y se conversó tanto que hubo mucho tiempo para que se trabajara la sincrónica de la música con los vídeos”.
De igual forma es destacable la cohesión que existe entre todas las canciones de El Poder del Mar (2021). Sobre esto, Pablo afirmó: “El disco siempre lo he pensado como una sola gran canción. También se me figura como un libro con distintos capítulos. Me gusta el formato del disco porque te permite tener más tiempo y espacio para hacer más cosas”. Las palabras de Pablo me recuerdan a las reflexiones de Steven Wilson (2016) acerca de que los discos musicales pueden hacer viajar tanto emocional como físicamente a las personas de la misma forma en que lo hacen las películas y la literatura.
Creo que la cohesión presente en El Poder del Mar (2021) posibilita un viaje que conecta con las imágenes de la naturaleza que va presentando Pablo, cuestión que queda plasmada en los videoclips que promocionan el disco. Con esto vuelvo a Wilson (2016) y su afirmación de que “la música y las imágenes van de la mano”. Sin duda el trabajo desarrollado entre Pablo y Camilo Bustos Delpin -director de los vídeos- genera una conexión entre música e imagen.
De los vídeos de las canciones Bruma, Pájaros y Frontera se extrae, siguiendo las palabras de Pablo, la relación que tenemos a diario entre dos energías. Le consulté al artista nacional cuáles son esas energías y comentó lo siguiente: “La idea de que nos relacionamos con dos energías surgió desde la noción de estar muy triste y, al mismo tiempo, estar con un impulso creador muy grande. Es, en el fondo, esta idea de que no hay luz sin oscuridad”. Además, Pablo añadió: “Siempre hay esta polaridad. Siempre se encuentran estas cosas que interactuan de manera ciclica en el cotidiano como el día con la noche, el blanco con el negro, la felicidad con la tristeza, el invierno con el verano”.
Otro punto en el que nos detuvimos al conversar con Pablo fue la presencia de colaboraciones en El Poder del Mar (2021). Particularmente, Pablo afirmó que “se volvió una necesidad el trabajar colaborativamente, una necesidad que no era tan fuerte antes”. En vista de aquello, el compositor nacional agregó: “Me dieron muchas ganas de entregar las canciones a otras personas, que cantaran otras personas y que hubiera mucha gente involucrada en el trabajo. Me gusta que, con las colaboraciones, las canciones terminan siendo muy diferentes a lo que se esperaba originalmente. Siempre me sorprenden las vueltas que da la música cuando trabajas con más personas”. Aquí es preciso decir que en el disco se encuentra la participación de Camila Moreno, Dek Primero, Fernando Milagros y Paola Navarrete.
Cabe destacar que trabajar de manera colaborativa significó mucho para Pablo. “El colaborar significó abrirme a un nivel más personal y compartir más mi música. Colaborar me permitió no ser tan hermético, cuestión que ha sido relevante porque algo ha cambiado en mí con esta experiencia. Aprendí mucho a nivel personal, sobre todo porque antes me daba vergüenza mostrar mi música a otras personas y no quería seguir sintiendo ese pudor, quería dejar de tener tanto recelo”, sentenció el propio Pablo.
Finalmente, hablamos con Pablo sobre el futuro. Particularmente, el músico nacional comentó que ya tiene pensado hacer otro disco -aunque es una idea muy pequeña todavía-. “Tengo muchas ganas de tocar y armar este álbum en vivo. Me interesa replantear de una forma distinta el disco para tocarlo en directo. Me tiene muy entusiasmado esto porque empezamos a armar un nuevo formato con unos amigos y espero poder mostrarlo pronto”, concluyó Pablo.
#LaCajita
Referencias
- Larsen, S. (2012). Mar, identidad y literatura. 1616: Anuario de Literatura Comparada, 2, pp. 171-188.
- 7mo Vicio Oficial. (16 de mayo de 2016). Entrevista Steven Wilson. [Archivo de Vídeo], YouTube. https://www.youtube.com/watch?v=_kdP0v9FFUM&t=630s
